
29 Ago La palabra dirige nuestra atención
Si yo le preguntara a cada uno de ustedes, si a lo largo de la vida han aprendido a manejar su idioma, seguramente muchos me dirían que sí. Y no solo eso, sino que además lo afirmarían con total convencimiento. Esto es lo que he venido recopilando como experiencia en las diversas capacitaciones y cursos que he ido desarrollando a lo largo de los años. Más sin embargo quiero que sepan que no es así. Es más, la situación es precisamente al revés, es decir que, el idioma nos maneja a nosotros. Quizás parezca un poco raro lo que estoy afirmando, pero permítanme desarrollar el concepto…
Tratemos de armar una frase o una oración sin la utilización de verbos, y verán que no pueden. Hablaríamos peor que Tarzán, porque al menos este personaje, cuando se expresaba sabía utilizar los verbos sin conjugarlos.
Ahora bien… quizás se pregunten… ¿y eso que tiene que ver?, y yo les responderé ¡Muchísimo!
Nosotros, como sujetos occidentales tenemos nuestra mirada orientada hacia afuera, es decir, el SER orientado hacia el HACER y TENER. Entonces, para hacer y tener, necesitamos de la acción, del movimiento… ¿y quién me proporciona esa cualidad?… El VERBO.
Dicho de otro modo, conforme fuimos aprendiendo nuestro idioma, éste se fue introduciendo en nuestra psiquis, dejando sus huellas y generando la necesidad conceptual y filosófica en la vida de HACER y TENER. De hecho si somos observadores, podremos darnos cuenta que la forma de evaluarnos y etiquetarnos los unos a los otros, es en función de lo que HACEMOS Y TENEMOS.
Yo recuerdo típicas frases de mis mayores que decían: “Si no estudiás no sos nada”, “Lo importante es tener tu propia casa”, “En cuanto junte unos pesos lo primero que hago, es un viaje para conocer”, o estas otras; “¡Viste que bien vestido que estaba!”, “¡Que hermoso auto que se compró!”, entre otras. Inclusive, si queremos ahondar un poco más y enfatizar lo que estoy diciendo, puedo recordar una vieja canción del conocido canta-autor Arjona, que en uno de sus temas conocidos dice “Jesús es verbo no sustantivo”. ¿Y qué significa esto?”, Que hasta los dioses occidentales están relacionados con la acción.
Muy diferente es la situación en el mundo oriental. Allí el SER se enfoca en el propio SER y si estudiamos sus lenguas, nos podremos dar cuenta que el verbo pierde importancia y se utilizan más sustantivos y adjetivos. Por otro lado, esto que estoy afirmando se puede observar en sus dioses. La gran mayoría de los dioses orientales no están relacionados con la acción, sino que por el contrario, con el silencio, la contemplación y se habla mucho de la búsqueda del vacío iluminador y la nada.
En conclusión, en occidente el SER está orientado hacia afuera, por lo tanto, necesita HACER y TENER. Por su parte en oriente el SER está orientado hacia el propio SER. Y en ambos casos la forma de comportarse se observa reflejado en sus idiomas.
Todo esto nos lleva a comprender que nuestro foco de atención y la concepción filosófica que hoy tenemos de la vida, fue condicionada por nuestro idioma. Entonces, si tú crees que manejas el idioma, sería interesante que a partir de ahora no lo subestimes tanto, porque quizás es él el que te hace pensar, sentir y actuar de un determinado modo, pero como estas alienado aún no te has dado cuenta.
Juan Carlos Lorenzo
Arquitecto, Psicólogo Social
Master Trainer en PNL & Coach Ontológico